miércoles, 7 de octubre de 2009

EL COMBATE DE ANGAMOS Y EL LEGADO DEL GRAN ALMIRANTE GRAÚ


El 8 octubre es el aniversario de la inmolación del máximo héroe peruano, el Héroe del Milenio, el Gran Almirante Miguel Graú Seminario , pero ese mismo día, como afrenta a su memoria, por espacio de 30 años, se hará el traspaso de la infraestructura del Terminal Portuario de Paita a un consorcio de capitales chilenos. Sin lugar a dudas, es un acto irónico que constituye una burla y ofensa a la memoria de Graú.

EL COMBATE DE ANGAMOS Y EL LEGADO DEL GRAN ALMIRANTE GRAÚ

La tradición siempre ha considerado como roe aquel que por su condición ética se pone por encima de sus semejantes . Héroe es el que resiste cuando los otros ceden, el que cree cuando los otros vacilan, el que se conserva fiel a sí mismo cuando los otros se prostituyen, el que se subleva contra la rutina y el conformismo en la que se complacen los cobardes.

El Combate de Ángamos es la página más gloriosa de nuestra historia naval y hasta hoy despierta el respeto y admiración a todo el mundo , incluso del pueblo chileno , no solo por el acto de sacrificio y honor de patriotas peruanos que defendieron con hidalguía la soberanía de la Patria sino también el gesto magnánimo del G

ran Almirante Miguel Graú Seminario ique nunca pisó al vencido, al contrario, le dio la mano y lo salvó de las aguas, por eso tiene bien ganado el nombre de “Caballero de los Mares”.

El 8 de octubre de 1879 se escribió una de las es una páginas más gloriosas de los combates navales que se tenga recuerdo en la historia marítima de las naciones.

Aquella epopeya heroica se inició el 30 de septiembre del mismo año, cuando la División Naval integrada por el monitor Huáscar ( al mando de Graú) y la corbeta Unión ( al mando de García y García), así como el transporte Rímac, zarparon hacia hacia el sur para continuar incursionando en costas chilenas; actividad que gracias a la habilidad y pericia del Gran Almirante Graú y su tripulación, dio buenos resultados , tomando en cuenta que tras siete meses de guerra con un adversario poderoso, que se había preparado para la guerra con antelación, que contaba con un poderoso material bélico, les había negado el dominio del mar.

El país sureño, siguiendo la consigna de la doctrina de Diego Portales ( « Chile debe ser la Inglaterra del Pacífico») , y la del estrategia naval del norteamericano Mahan ( «la gran expansión necesitan una poderosa flota»), se armó lo mejor posible y llegó a poseer la mejor escuadra del continente , comprándoles a los Estados Unidos muchos de sus barcos al finalizar la Guerra Civil.

Al iniciarse las hostilidades( abril de 1879), Chile aspiraba poner fuera de combate a Bolivia y el Perú , en solo cuatro meses , para luego dar cuenta de Argentina , quien se encontraba desguarnecida por aquel entonces , apoderándose de la Patagonia, territorio en disputa.

En la guerra existe un axioma : “El vencido merece su suerte porque c

ometió errores antes o durante el conflicto”.

A pesar de esto, el Perú resultó un hueso duro de roer.

En el mar, el Huáscar mantuvo en jaque a la escuadra enemiga , retardando por seis meses el tan ansiado desembarque que provocó enormes mítines en Santiago , en vista de la incapacidad de sus jefes.

Graú , como todo genio militar , explotó al máximo lo poco que tenía a su disposición .

¿ Qué no hubiera pasado si el Perú se hubiese preparado con antelación?

Graú , invencible con el Huáscar, causó el relevo de su alto mando naval.

El nuevo comandante en jefe de la escuadra chilena, Almirante Riveros, lo primero que hizo fue planificar la captura del Huáscar que se había convertido en la

pesadilla de la marina chilena.

La escuadra enemiga se divide en dos divisiones: la primera, conformada por el acorazado Blanco Encalada, la corbeta Covadonga y el transporte armado Matias Cousiño; la segunda, por el Cochrane, Corbeta O’Higgins, y la coñonera Loa.

Las dos divisiones zarpan hacia Arica el 2 de octubre .

Después de dos días de navegación, no encuentran ninguna nave peruana , pero se enteran que éstas estaban incursionando en sus costas.

Ambas divisiones se separan para navegar hacia el sur.

La primera se pega a la costa ; la segunda, hacia Alta Mar.

El plan chileno consistía en acorralar al Huáscar y la Unión ,

aprovechando la mayor velocidad de los buques de la segunda división y cortarles la retirada.

El 4 de octubre , la División Naval peruana llega a Sarco, al sur de Huasco, y apresa a la goleta chilena Coquimbo y la despachó hacia Arica. Luego, siguen hasta Tongoy , cerca de Valparaíso.

Graú conocía del zarpe de los chilenos y por ello prefiere no arriesgarse yendo más al sur y retorna al norte.

En la madrugada del 8 de octubre, a la una de la madrugada, el Huáscar

arribó al puerto de Antofagasta . No había buques chilenos a la vista y continuaron hacia el norte.

A las 3 de la madrugada del mismo día, se encuentra frente a frente el Huáscar y La Unión con la Primera División Chilena.

Luego de navegar tres horas, logran burlar al enemigo. A las 7 : 15 pm., el Huascar es cercado por la Segunda División Chilena ; entonces, deciden continuar hacia el norte con el fin de rebasar Punta Angamos.

Evaluando la situación , Graú dispone que La Unión se salve , aceptando el enfrentamiento como algo inevitable.

Eran las 9 :40 de la noche cuando presentó combate con el primer cañonazo contra el «Cochrane « que estaba a 1000 yardas de distancia .

Así empezó el Combate de Punta Angamos.

A las 9 :50 de la noche, en pleno fragor del combate , un proyectil impactó en la torre donde se encontraba el Almirante Graú en compañía de su asistente , Teniente Diego Ferré . Ambos volaron en pedazos.

En esos momentos , el marino más grande del continente, pasa a la inmortalidad, pero el combate continuó y el espíritu vivo de Graú se mantuvo entre los suyos.

Asume el mando el comandante Elías Aguirre y el enemigo con su poderosa artillería, fracciona poco a poco la nave peruana.

Aguirre cae muerto y le sigue Carbajal , Comandante de Corbeta ,

quien es herido de gravedad ; luego, el teniente Rodrigues , cae herido ; el Teniente Palacios , que con su mandíbula destrozada , no abandona el puesto. Y finalmente, el Teniente Santillana , es alcanzado por una ráfaga de metralleta.

Todos lucharon hasta el final y vendieron cara sus vidas.

Cuando el Teniente Pedro Garezón asume el mando, al ver que no había posibilidad de triunfo, ordena abrir las válvulas de fondo para hundir el buque y tras dominar a la tripulación, exhausta pero con la moral y el orgullo en alto, toman l

os chilenos el Huáscar.

Cuando abordaba el enemigo el Huáscar, los ofici

ales peruanos que estaban sobre la cubierta gritaron a viva voz : « Los peruanos no se rinden».

El relato de este combate es la página más gloriosa de nuestr

a historia nava

l que causa respeto y admiración a todo el mundo , incluso al pueblo chileno.

Este hecho nos debe llamar a la reflexión en torno a lo que ha sucedido con la concesión marítima del Puerto de Paita , una herida abierta para los piuranos y una afrenta a la memoria de Graú .

La entrega del Puerto de Paita a los capitales chilenos es una afrenta al sacrificio de ese puñado de valientes , al mando del Gran Almirante Miguel Graú , que no dudaron un instante en ofrendar su vida por la soberanía marítima y la soberanía de nuestra patria .

En esta página gloriosa de nuestra historia resalta con nitidez la figura del

Gran Almirante Miguel Graú Seminario .

Su vida reúne todas las virtudes de la condición humana y encarna todos los valores de la Patria.

En el Perú es uno de los héroes mas importantes quien cumple con todos los requisitos del padre tradicional: valiente, justo , generoso.

Héroe que no necesitó del triunfo final para elevarse en toda su dimensión , condensando dentro de su admirable marco de epopeya.

Todos sus esfuerzos, virtudes y sacrificios fueron posibles para cumplir su deber y defender el honor nacional hasta llegar al holocausto de su propia vida el 8 de octubre de 1879, durante la infausta Guerra del Pacífico.

Hizo la guerra con maestría y destreza propias del hombre que nació para la defensa de la propia , pero nunca olvidó que toda guerra no sólo es eliminación o destrucción del enemigo, también hay cuestiones morales e intelectuales.

Miguel Graú, el héroe más reconocido y admirado del Perú es la personificación de la generosidad y de la sencillez; símbolo de la grandeza naval y de la gloria de nuestra Marina de Guerra.

En el combate de Iquique ( 21 de mayo de 1879) prueba una vez más su grandeza espiritual. Después del hundimiento del Esmeralda y de la muerte del jefe chileno , Arturo Prat, salvó a los sobrevivientes del barco vencido . Los marinos chilenos al bajar a tierra en Iquique no pudieron dejar de dar vivas « al Perú generoso» .

Asimismo, en un nuevo acto de nobleza que le valió el título de «Caballero de los Mares», ordenó tras la muerte del Comandante Pratt, recuperar sus restos y pertenencias los que remitió a su viuda , acompañados de una sentida carta, en la que entre otras cosas, decía :

«Señora , un sagrado deber me lleva a dirigirme a usted, siento profundamente que esta carta , por las luchas que se va a remomerar, aumente su dolor, en combate , su digno esposo fue victima del arrojo en defensa y gloria de su país , deploro tan infausto acontecimiento y la acompaño en su duelo , le envío las inestimables prendas de su valeroso esposo, en la esperanza que ellas serán un pequeño consuelo en medio de tanta desgracia , reitérole mis condolencias , respeto y consideraciones».

Esto demuestra nuevamente su altísima calidad humana al remitir a la viuda las prendas halladas junto al cadáver de su esposo, acompañadas de una carta que figura en la antología de la nobleza y la ternura.

En 1976, por iniciativa del representante del departamento de Piura, su ciudad natal, el congreso nacional le otorgó al héroe el grado póstumo de Gran Almirante del Perú y se dispuso que en el hemiciclo se mantuviera por siempre una curul en su honor y que toda sesión parlamentaria se iniciara evocando su nombre. Tiene la condición de Senador Vitalicio del Congreso de la República.

«Honor y Gloria « a Usted , Almirante Miguel Graú, Caballero de Los Mares.

Su muerte no ha sido estéril y su sacrificio no ha sido en vano.

El dar su vida por nuestra querida patria constituirá sin duda alguna, el patriótico anhelo de todo el pueblo peruano.

Los restos del Almirante fueron repatriados el 15 de julio de 1890 y el 8 de septiembre de 1908 fueron colocados en la Cripta de los Héroes de la Guerra del Pacífico , donde hoy reposan.

Miguel Graú es una columna de la peruanidad, sustento espiritual , no sólo de la Marina de Guerra que da vida al Perú y la proyecta al futuro.

Graú es un modelo de hombre , de guerrero, de ciudadano , padre ejemplar, parlamentario, patriota en circunstancias de guerra y en medio de la euforia popular, asume el rol que la Patria exige a sus mejores hijos en la severa prueba de 1879 y decide : “ Si el Huáscar no regresa triunfante al Callao, tampoco él regresará".

El 8 octubre es el aniversario de la inmolación del máximo héroe peruano, el Héroe del Milenio, el Gran Almirante Miguel Graú Seminario , pero ese mismo día, como afrenta a su memoria, por espacio de 30 años, se hará el traspaso de la infraestructura del Terminal Portuario de Paita a un consorcio de capitales chilenos. Sin lugar a dudas, es un acto irónico que constituye una burla y ofensa a la memoria de Graú.

1 comentario:

Ruth dijo...

Primero que nada gracias por la reseña tan bien detallada ingrese buscando informacion de Miguel Grau y por fortuna encontre esta pagina y si definitivamente es UNA OFENSA A LA MEMORIA DE GRAU NUESTRO MAXIMO HEROE COMPARTO VUESTRA OPINION GRACIAS